Hoy es un día muy especial, el Niño protagonista de este blog cumple 4 añazos. Cuatro años que han pasado volando.
Revisando el post del año pasado, veo que algunas cosas han cambiado, pero otras no:
Le sigue encantando cocinar, y aún necesita ayuda con los huevos.
La pasión por los coches sigue latente, aunque empiezan a estar igualados con los super héroes.
El libro de cada noche es totalmente imprescindible. Y sigue durmiendo con su perrito.
Superamos la operación pañal con éxito muy rápidamente, y no hemos tenido ningún accidente.
La mamitis continúa, y aunque a veces raya la obsesión, tengo que confesar que me encanta ese amor incondicional que tiene hacia mi.
Su nueva obsesión son las letras: quiere saber lo que pone en todas partes, y le encanta escribir su nombre en cualquier papel que encuentra en su camino.
Lo que es igual que el año pasado es que nos quiere MUCHÍSIMO, igual que nosotros a él.
¡FELIZ CUMPLEAÑOS, PEQUEÑO!
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